bitácora . día ocho

Monamug. Hoy ha llovido todo el día, a partir de las doce o una más o menos. Después de almuerzo, y porque la única alternativa era quedarse pegado a la estufa, me acosté a trabajar, tapadita con mi saco de dormir, con guatero y una taza de chocolate caliente. Obviamente, con tanto auto regaloneo caí en la durma pronto, pero desperté antes de que você se conectara. Me despertó totalmente verlo en esa pequeña cámara del cyber. Después de nuestra pequeña conversa, y de ver sus zapatillas aleteando frente al lente, y secando de mi carita la emoción de verlo aparecer offline, volví al trabajo más inspirada y ya casi tengo acicalada la sección de Materiales y Métodos (al menos de todo lo que he hecho o planeo hacer en el corto plazo)

Fue agradable, de todos modos, ver cómo llovía y saber que no tenía ninguna obligación de salir a la calle, ver caer el agua y arroparme más en mi camita, como cuando estaba en la U, y amanecía lloviendo y me quedaba en cama, era lo máximo. Ahora mismos, vida, está nevando, así que mi mamá y la Cami andan todas revolucionadas allá afuera. Voy a echar una mirada, después de todo, no todos los años cae nieve por aquí, esta nieve imperialista que cae en el puro barrio alto...

Buona noite mylove. Le dejo esta preciosa foto de Chema Madoz, que elegí porque es tan rico quedarse mirando por la ventana, al menos en esta ocasión. Millones de besos y espero arrumaquearlo cuando vuelva, con o sin onda polar. Te amo vida..

Feliz día mi amor