miércoles, enero 23, 2008

23 Enero

Chiquilili

Día de cóctel en la EdeV. Por supuesto que hubo una mañana estresada porque Bambi llegó desesperada por las cosas que faltaban y pendiente de todo lo que tenía que estar listo. Nos tenía al borde del colapso. Cuando llegaron las Araucarias, preciosas, yo me calmé un poco. Quedaron muy bien, y todo el mundo estaba feliz con ellas. Luego, logré terminar el discurso y la presentación con fotos de los estudiantes (que estoy segura de que nadie vio), y recibir y atender longis, todo en tacos y con mi blusa verde, esa que me puse la primera vez que fui a tu casa, aunque no creo que la recuerdes, y que hoy por hoy me queda más bien muy apretada. Renée nos alisó el pelo en la tarde, pero ya no está tan liso.

De almuerzo había porotos con chorizo, me armé un choripán y me comí la ensalada, casi no comí los porotos mismos, quedé bien. Me traje dos Araucarias, para que mi madre se quede con una y le lleve a mi abuelita la otra de regalo. Llegué como a las nueve y media a la casa, me lavé las patas, las manos, la cara y de pasadita mis chalas nuevas. Me tomé una limonada, mi madre no está, fue a almorzar donde mi Nana y ahora está donde el Carli, quizás a qué hora llegue esta señora (me gusta que ande paseando por ahí) Mi Nana dijo que me mandó humitas, las espero con ansias, chiqui.

Me duele la espaldi, cosa... tengo sueño también, y lo extraño muchísimo. Me da un poco de rareza no hablarle por msn como todas las noches. Espero que su puesto se arregle, que mañana las cosas funcionen bien, que venda muchas cosas y que haya panoramas entretenidos.

Quiero que el clima esté rico, que haya sol y aire marino, que las empanadas siempre estén buenas y que muchas personas compren sus acuarelas y sus moais. Espero que duerma bien y que más personas prendan con la idea de tomarse unas cervezas en la noche. Ojalá que la gente nueva que conozca sea amable y buena, sin sorpresas ni segundas intenciones.

Y por sobre todo, espero que ya haya reservado su pasaje de vuelta a mis brazos.

Coisa, te amo.
Hasta mañana, le entregaré un nuevo mini reporti. Adieu...